martes, 10 de noviembre de 2009

NOCHE CENTÉSIMA

Sueño que sueño que me despierto, viene tu nombre, se mezcla en mis dedos, y juntos, vos, tu nombre, mis dedos y yo, nos hacemos una tarta de espinaca, zanahoria, remolacha, cebolla, huevo, jamón y queso. Como me enseñaste, y como te aprendí mientras me decías lararira rirarí. Si volvés más tarde, nos la comemos. No así el mundo. Ya no. Porque miro mis dedos y no está tu pelo revuelto en mi cama.

No hay comentarios: